Hipotiroidismo y Alimentación

Cómo ya hemos explicado anteriormente en uno de nuestros Blogs, en la consulta de Nutripharma, una de las partes más importantes para establecer las pautas y recomendaciones a nuestros pacientes, es conocer bien de cerca su historial médico o de salud. Y es en esta anamnesis que realizamos, donde observamos un patrón que se repite con frecuencia y es que, un gran número de nuestros pacientes está diagnosticado de hipotiroidismo y está tratado con hormonas de sustitución.

“Es que con el tiroides no pierdo peso” “Desde que tengo tiroides he cogido mucho peso” “No consigo bajar un gramo con el tiroides, estoy cansada” “He intentado todo y no me funciona nada, el tiroides me agobia mucho”

Estas son muchas de las frases que más nos llegan día sí y día no a la consulta y vamos a intentar poner en claro hasta qué punto son ciertas y cómo podemos ayudar a resolver el problema de los kilos de más por culpa de esta glándula tan “odiosa” para muchos de nuestros pacientes.

¿Qué es y qué hace la hormona tiroidea?       

La función principal de la hormona tiroidea es regular la forma en la que los diferentes órganos consumen la energía. Si hay exceso de hormona, numerosos tejidos gastarán demasiada energía y es posible que se pierda peso. Por contra, si hay poca hormona como sucede en el hipotiroidismo, los tejidos gastarán poca energía y es posible que aumentes de peso.

¿Cuál es la relación entre hipotiroidismo y aumento de peso?

Cuando falta hormona tiroidea el metabolismo se ralentiza y los tejidos consumen menos energía de la habitual. Pero en realidad, cuando hay déficit de hormona tiroidea lo que sucede es mucho más complejo:

  • Disminuye el metabolismo basal
  • Aumenta la retención de líquidos y sal
  • Aumenta el porcentaje de grasa corporal
  • Aparece debilidad y cansancio que provocan disminución de la actividad física y por tanto todavía se consume menos energía
  • Puede aparecer estreñimiento que magnifica el aumento de peso

Con todo esto, es fácil pensar que el aumento de peso estaría más que justificada si padecemos esta patología, aunque no lo debemos confundir con el sobrepeso u obesidad, como sucede en algunos casos, ya que también el estilo de vida, la alimentación y la actividad física influyen en el aumento de peso. Generalmente se acepta que el aumento de peso relacionado con el hipotiroidismo está por debajo de los 5 kg, aunque esto puede variar mucho.

¿Recuperaré mi peso habitual?

Cuando se inicia el tratamiento con hormona tiroidea y se restaura la cantidad normal de tiroxina en sangre, se suele perder peso. Lo previsible es que se recupere el peso previo al hipotiroidismo, aunque esto no siempre es así; ya que si no controlamos además la dieta y la actividad física será mucho más difícil.

Por lo tanto, relacionar el hipotiroidismo con el sobrepeso o la obesidad, resulta ser un falso mito, nadie tiene obesidad exclusivamente como consecuencia de un problema de tiroides.

Como hemos visto en los puntos anteriores, la ganancia de peso por el hipotiroidismo es modesta (máximo 5kg) y además se suelen recuperar al tratarlo de forma correcta.

Tampoco es cierto que las personas con hipotiroidismo bien tratado tengan un “metabolismo más lento”. Al tomar el tratamiento hormonal sustitutivo, la cantidad de hormona en sangre se normaliza y por tanto también se normaliza el metabolismo.

A continuación, daremos algunas pautas alimentarias, una de las formas de controlar el peso cuando aparece una alteración de la tiroides es jugando con la alimentación a tu favor: los alimentos pueden ayudarte a regular el funcionamiento de esta glándula. Si la glándula funciona mejor, tu metabolismo dejará de ser lento y te ayudará a no engordar tan fácilmente.

¿Qué comer si tienes hipotiroidismo?

Las hormonas tiroideas, como la tiroxina, son los únicos componentes del organismo que contienen yodo. Nuestro cuerpo no puede sintetizar este mineral por lo que es fundamental obtenerlo a través de los alimentos.

Una de las causas más habituales que producen hipotiroidismo es la deficiencia de yodo. Por tanto, para prevenir esta alteración debes seguir una dieta variada y equilibrada que incluya alimentos ricos en yodo.

Las medidas dietéticas pueden hacer mucho para suavizar los síntomas derivados de este problema pero nunca deben sustituir las recomendaciones médicas que el especialista considere necesarias.

Alimentos favorables o a tener en cuenta:

  • La sal, que sea yodada: no te excedas en la cantidad: una cucharadita de café al día basta (unos 3 gramos).
  • No olvides los alimentos del mar. Pescados, mariscos y algas son las fuentes más ricas en yodo. El pescado además te aporta proteínas, vitaminas, minerales y ácidos grasos omega 3. EL marisco,  procura que este sea marino. Las algas también son muy ricas en yodo pero las debes tomar con moderación.
  • Aumenta lo verde y lo naranja. Algunas verduras, como las espinacas y los berros, concentran el yodo presente en la tierra en que han sido cultivados. Las zanahorias o la calabaza proporcionan vitamina A, cuya deficiencia puede llegar a agudizar los efectos de la carencia de yodo.

¿Qué alimentos debo evitar?

No se trata de prohibir nada pero en caso de que tengas problemas de tiroides es mejor limitar el consumo de ciertos productos.

  • Las hortalizas de la familia de las crucíferas (col, coliflor, coles de Bruselas, brócoli, nabos, berzas, rábanos, mostaza…) la yuca y el boniato contienen bociógenos, es decir hacen que el yodo que entra en el organismo no se absorba bien. Así, aunque te esmeres en tomar algo rico en yodo, estos productos evitarían que tu cuerpo lo aprovechara bien. No abuses de ellos y tómalos siempre cocinados, ya que con la cocción estas sustancias desaparecen.

Desde Nutripharma, esperamos que os haya ayudado a entender mejor, la relación que existe entre hipotiroidismo y sobrepeso, y haceros ver, que todo es posible con esfuerzo y ayuda, y para ello estamos a vuestra disposición.

 

Escrito por:

Celia Gil, Nutricionista Nutripharma en Huelva.