¡AQUÍ NO SE TIRA NADA!

Del mismo modo usamos la cabeza y espinas de un buen pescado y lo usamos para hacer un buen fumet, lo mismo deberíamos hacer con la parte verde de un puerro o las hojas de las zanahorias.

Hojas, tallos y troncos son partes de verduras y hortalizas que habitualmente desechamos pero en realidad podemos aprovecharlas en la cocina porque son perfectamente comestibles.

Os proponemos algunos ejemplos:

  • PARTE VERDE DE CEBOLLETAS, CEBOLLAS, PUERROS Y AJETES: si son demasiado fibrosas se pueden usar para enriquecer un caldo, pero los tallos de cebollas y cebolletas salteados se pueden usar para tortillas, hamburguesas, revueltos, etc. Incluso los más finos se pueden usar crudos cortados en rodajas finas como si fuera cebollino.
  • TRONCO DEL BRÓCOLI: en algunas ocasiones es muy grueso, pero lo solucionaremos pelando ligeramente la capa externa y veremos que lo que nos queda es una parte más blanca y tierna. Se consume crudo o salteado o cocido al vapor, incluso asado al horno junto con otras verduras y por supuesto hervido y en purés.
  • HOJAS Y TALLOS DE LA REMOLACHA: se pueden usar tal y como usaríamos un manojo de acelgas, es decir, salteadas con ajos, en tortillas, en guisos; tienen un sabor más suave y los tallos son menos fibrosos.
  • PIEL DE CEBOLLA: añadida a caldos y fondos da muchísimo sabor; también deshidratada en el horno para dar sabor a sopas o salsas y aroma a masas de pan o galletas saladas.
  • HOJAS DE ZANAHORIAS: son finas y suaves y bien picadas son como un condimento, como si fuera perejil o cilantro: para salsa verde, tortillas vinagretas y marinados. También añadido a sopas y caldos. Si las encuentras muy amargas puedes blanquearlas para eliminar ese toque amargo introduciéndolas durante 1 minuto en agua hirviendo y después ponerlas en un bol con agua helada.
  • HOJAS DE CHIRIVÍAS, RÁBANOS Y NABOS: Se pueden usar especialmente añadidas en sopas. Requieren cocciones cortas y su uso como acelgas o espinacas.
  • PIEL DE PATATAS: añadidas a caldos y fondos. También horneadas (bien lavadas a 200º con un poco de aceite, sal y especias) hasta que estén crujientes; son un snack muy saludable
  • HOJAS HINOJOS: pueden usarse como si fuera perejil o eneldo, dándole a los platos un sabor característico anisado: para cremas de verduras, ensaladas, vinagretas, sopas, tortillas y en platos de legumbres facilitan mucho la digestión. También salteadas con ajo, aceite, vinagre y sal.
  • HOJAS BRÓCOLI, COLIFLOR Y OTRAS COLES: las más tiernas (las interiores) incluso crudas o salteadas y el resto (las exteriores) cocidas para hacer cremas de verduras y caldos.
  • HOJAS APIO: son muy aromáticas y cuanto más verdes mejor. En ensaladas picadas y formado parte de aliños; también para caldos y cremas.
  • VAINAS DE HABAS Y GUISANTES: cocinadas junto con otras verduras para cremas; y si son muy tiernas incluso para saltearlas, en tortillas, etc.
  • HOJAS EXTERNAS Y TRONCO DE ALCACHOFAS: los tallos pelados ligeramente se usan para cocinar junto a las alcachofas y las hojas para enriquecer caldos y si no son excesivamente duras se pueden freír o asar en el horno, convirtiéndose en unos chips perfectos para salsas.
  • PIEL CALABAZA: la de algunas calabazas es más fina y puede usarse en la misma crema de calabaza triturada o también deshidratada en el horno como un snack.

 

Dadles una oportunidad a las verduras y hortalizas enteras y recordad que para aprovecharlas es indispensable que sean verduras frescas y de calidad.

 

RECETA DE CALDO DE VERDURAS DE APROVECHAMIENTO: 

Ingredientes:

  • Parte de arriba (la verde) del puerro
  • Hojas de alcachofas
  • Trozos de calabaza o pieles de calabaza
  • Piel de un tomate
  • ½ cebolla
  • Cualquier hoja de verduras que tengas
  • 3 L agua

Elaboración:

Hervir todo junto a fuego medio sobre 1 hora. Colar. Una vez frío se puede congelar y usar para enriquecer cualquier plato.

 

Escrito por:

Gloria Rosell, Nutricionista Nutripharma en Almería.